El espectáculo del 4×4 volvió con el Festimotor a Camarena
Cuando llega el verano y el calor aprieta, los aficionados al 4×4 en la zona centro saben que tienen una cita en la llanura toledana. Por quinto año se ha celebrado el Festimotor de Camarena. Afición al motor, al 4×4 y ganas de pasarlo bien con los amigos.
En esta ocasión el encuentro cambió su habitual formato de las pruebas de 4×4, de dos jornadas a una sola jornada maratoniana, la del sábado 22, que se alargó hasta bien entrada la madrugada. El punto de encuentro fue el habitual, donde fueron llegando desde primeras horas de la mañana los 34 participantes inscritos en las diferentes categorías. Momento de reencuentros dada la sequia de triales 4×4 que esta temporada asola el centro de la península.
Con puntualidad daban comienzo las zonas reservadas a los vehículos de serie y preparados. Dos zonas que en esta ocasión resultaron más suaves que en citas anteriores y que los vehículos en su gran mayoría conseguirán superar, algunas decisiones erróneas y exceso de confianza provocaban algunos atascos que en su mayoría eran solucionados con el trabajo del copiloto, por lo que participantes y público disfrutaron de unas zonas más dinámicas.
8 participantes en la categoría de series, sobre dos zonas muy asequibles para vehículos sin ninguna preparación, buen momento para iniciarse en el arte del trial 4×4 y que salvo un gran tubo colocado transversalmente los obstáculos podían superarse sin temor a daños en la carrocería, algo muy importante cuando hablamos de estricta serie. Tal fue la igualdad que los tres primeros clasificados empataron a puntos, decidiéndose por la clasificación por tiempo realizado. Y aquí se impuso la experiencia siendo la victoria para Fernando del Hierro, seguido de Miguel A. García y en tercer lugar Simón «Cabrita».
En la categoría de preparados la tónica fue la misma, obstáculos asequibles para los participantes aunque aquí la potencia del motor y recorridos de suspensión jugaron un papel más importante. Los catorce equipos participantes pudieron hacer las zonas sin temor a daños innecesarios, tan solo una avería entre todos ellos. Poco uso de implementos y por una vez trabajo más relajado para los copilotos. Cruces de puentes y algún escalón con pendiente ponían la salsa de la jornada, siendo el exceso de confianza, quizá, el peor enemigo. La igualdad fue máxima con ocho pilotos empatados a puntos, siendo la victoria para Ismael Marín, secundado por Pedro L Arribas y Juan José Muñoz. Silvia Sánchez, la única fémina de la categoría como siempre encandilaba al público por su tesón, alcanzando la décima posición a 35 puntos del vencedor.
Tras la finalización de estas categoría llegaba el momento de reponer fuerzas, degustando la caldereta que había preparado la organización, momento ideal para comentar el desarrollo de la jornada.
Estaba prevista que diversos equipos participantes en el Campeonato de España de Rallyes TT realizaran un exhibición, pero la mala fortuna quiso que, por accidente o por averías los vehículos no pudiera acudir a la cita, lo que de algún modo rompió la dinámica de la jornada, dejando un vacio entre las actividades de la mañana y el plato fuerte de la Jornada. El Extremo 4×4.
Con los últimos rayos de luz comenzaban los doce participantes de la categoría las dos zonas preparadas. Otras dos formarían la especial nocturna.
Nuevamente los pilotos de la especialidad demostraron los amplios límites a los que son capaces de llevar sus monturas, sus espectaculares recorridos de suspensión son capaces de modelar profundas zanjas capaces de tragarse un turismo, inclinar los laterales de los vehículos sobre el terreno y avanzar sin más ayuda que la del copiloto. Esos momentos que los aficionados esperan cada año.
Alguna gran poza puso en apuros a algún equipo necesitando el uso de escaleras, que no penalizaba pero hacia perder la bonificación, pero sin duda lo que más agradeció el público fueron los espectaculares cruces de puentes y los equilibrios asombrosos de los vehículos. Con un mano a mano entre Juanjo Herrero y José A. Herrador, que se decantó por el primero. En tercera posición se situaba David Gómez que obtenía este tercer puesto gracias al mejor tiempo realizado ya que cinco pilotos alcanzaron la misma puntuación.
Una vez retomada la actividad tras la cena, siendo ya noche cerrada, los equipos se enfrentarían a la clásica especial nocturna, con alguna novedad. En esta ocasión y divididos en dos tandas, los equipos situados en línea debían superar un gran zanja, optando el primero en superarla a escoger la zona de inicio ya que se dividía en dos partes. Un grupo de contenedores en cada una de ellas marcó la diferencia, especialmente para los vehículos con una medida de neumático más pequeña, que sufrieron de lo lindo para superarlos. Aquí se puso de relieve más que en ninguna otra los inmensos recorridos de las suspensiones y lo cerca que se puede llegar a estar de un vuelco.
En esta ocasión se invertirían las posiciones, siendo José A. Herrador el vencedor de la especial y Juan José Herrero el segundo, con Manuel Sánchez en tercera posición pisándoles los talones.
Ya de madrugada se daba por finalizada esta jornada dedicada íntegramente al 4×4, en que la organización del Festimotor puso una vez más todo su empeño con una maratoniana jornada, especialmente para los comisarios y colaboradores, y que ha decir de muchos de los participantes, disfrutaron .