Acción 4×4

El Festimotor de Camarena cumplió las expectativas

Un año más el Festimotor de Camarena (Toledo) no defraudó a quienes estoicamente aguantaron el intensísimo calor que hubo que sufrir durante el fin de semana del 25 y 26 de junio en que se desarrolló la competición. Tercera prueba puntuable para el Open Trial 4×4 Zona Centro.

 

El Festimotor de Camarena es más que un trial, es un fin de semana dedicado al mundo del motor, donde el sábado, quienes se acercaron hasta la localidad toledana, pudieron disfrutar de vehículos clásicos que forman parte de la historia automovilística de este país, pudiendo disfrutar además de los equilibrios del especialista Emilio Zamora, que a bordo de diferentes motocicletas y quads deleitó a los asistentes con una espectacular demostración.

Extremo

En cuanto al trial, el sábado por la tarde estaba reservado a la categoría reina, los vehículos de Extremo, cita a la que acudieron ocho equipos. Para ellos la organización había preparado dos largas zonas que habían de realizarse en ambos sentidos, sin embargo la dificultad de las mismas impidió que se diera la segunda pasada en sentido inverso. Tras el tradicional sorteo, la apertura de la primera zona recayó en David Guerrero y David Hidalgo con su Jeep Proto. Pero el destino quiso que apenas comenzada la zona el vehículo sufriera una avería de motor que los obligaba al abandono. Mala fortuna para los de Alcoy, que están realizando un gran esfuerzo por participar en este Open y no están pudiendo demostrar su valía.

Los siguientes en lanzarse al ruedo eran Manolo Ruz y Fernando Aceyton con su Santana V8, Conseguían superar la primera zanja transversal y una poza de agua, y no sin esfuerzo la inclinada rampa de salida. El siguiente obstáculo, unas gigantes rocas y troncos  les obligó a trabajar de lo lindo, pero consiguieron superarlas hasta llegar a una larga y profunda zanja longitudinal que no pudieron superar al desllantar un neumático y sufrir además algunos problemas de motor. Ninguno de los participantes pudo superar esta primera zona y uno tras otro quedaron enganchados entre las rocas y los troncos. Al menos pudimos deleitarnos con el ascenso de la rampa que había a la salida de la poza que el Unimog de Manuel Pontón superó lenta y elegantemente y donde el pequeño vehículo alemán mostró excepcionales cualidades.

La zona número dos le tocaba en suerte a Juan José Herrero y José Pablo Ruiz con su Nissan Patrol. Comenzaban sobre un lecho de piedras con inclinación lateral más complicada de lo que a simple vista aparentaba, teniendo que ascender una rampa para llegar a una gran poza, lo que hicieron sin excesivas dificultades, pero la poza se les resistió y tras varios intentos rompieron la dirección. Aunque pudieron reparar más tarde. Complicada zona como decimos, donde también sucumbieron Antonio Bauzán y Tomás Miramón, que veía como salía ardiendo el motor de su Defender, aunque era apagado de inmediato y continuaba con la prueba, haciéndose con el segundo puesto. El Unimog de Manuel Pontón tampoco podía superar la salida de la poza y se quedaba enganchado en una zona mixta de troncos y piedras como el resto de sus competidores.  Jesús Agudo afrontaba la poza con decisión y volcaba hacia atrás con su Suzuki, aunque sin consecuencias para el piloto. El Santana de Team Gumball, tampoco podía con esta segunda zona al sacar las dos ruedas fuera de las cintas, pese a ello se alzaban con la tercera posición y sería ya de noche cuándo por fin un equipo pudo alcanzar el final, El Team Hergauto, consiguió con tesón, destreza y buen uso del cabrestante salvar los obstáculos milímetro a milímetro consiguiendo finalizar la zona, alzándose de este modo con la victoria entre los Extremos.

El domingo tenían lugar las pruebas reservadas para las categorías de Serie y Preparados, que se desarrollaron bajo un calor de justicia, y que deparó un gran espectáculo.

Preparados

Entre los Preparados, nueve inscritos dispuestos  a darlo todo bajo el abrasador sol, con dos zonas que habrían de realizar en ambos sentidos.  Muy técnicas y que se atragantaron a varios equipos. Hubo que lamentar el prematuro abandono  por avería mecánica de Juan Carlos Moraleda que solo pudo afrontar la primera de las zonas. Esta categoría resultó de las más competidas el fin de semana, con varios equipos separados por un puñado de puntos.  Los vencedores en la prueba anterior, Julián Gómez y Javier Valoria sucumbían al quedar empanzados sobre el mismo tronco en las dos pasadas a la zona uno, Al igual que Adam Brenan y César Flórez, en la misma zona pero en unas zanjas en forma de uve,  con algunos problemas con los bloqueos de su Mercedes G y algunas decisiones equivocadas perdían posibilidades de acercarse al podio tras la realización de dos buenas zonas.

Sergio Ortego y Juan Carlos Cabrerizo tampoco comenzaban con buen pie al quedar atascados sobre el dichoso tronco en la primera zona, y pese a realizar las tres zonas restantes de forma magistral no podían recuperarse del fiasco.

Ismael Madrigal y Alejandro Fernández realizaron una prueba muy regular, pese a la rotura de su diferencial trasero en la segunda de las zonas, realizando las dos restantes de un modo impecable, especialmente la  última que les tocó en suerte (La número 1 a la inversa) , Un recorrido que comenzaba con unos contenedores metálicos y que tras una profunda zanja longitudinal afrontaba la subida a unos grandes tubos y en la parte final, dos zanjas en v y un enorme tronco (si, ese) finalizando con un enorme bloque de granito, obstáculos que superaron sin grandes dificultades gracias al buen hacer de piloto y copiloto.

Nos acercamos al podio y nos encontramos con la gran sorpresa del día; Raquel Gómez, al volante de un Nissan Gr y Copilotada por José Pablo Ruiz se alza con la cuarta plaza en su primera participación en un trial 4×4, y nada menos que en la que es sin duda la categoría más competida este año. ¡Enhorabuena!.

El podio estuvo muy reñido, tanto que la segunda y tercera plaza se decidió por la suma de tiempos en las cuatro zonas. El Tercer puesto fue para José Antonio González y David Huertas con su habitual Nissan Gr, que sufrieron algunos problemas con el bloqueo de diferencial, lo que unido a alguna cinta que pudieron evitar en la zona 1, les hizo tener que conformarse con esa tercera plaza, ya que el resto de las zonas las realizaron casi a la perfección penalizando tan solo 5 puntos en  la zona dos. El segundo puesto fue para Alfonso Moreno y José Ignacio Eneriz con el Suzuki Vitara de Mas4x4, que en cada prueba se van superando realizando una jornada muy regular, sin grandes alardes pero evitando los fiascos y penalizando lo imprescindible en cada zona, dejándonos al final de la jornada algunas de las imágenes más espectaculares de Camarena.

Juan Carlos Gómez y Javier Valoria (que se desdobló en las labores de copilotaje) se impusieron con autoridad, haciendo valer las excelentes cualidades de su bonito Jeep Cherokee, basando la victoria en un recorrido muy regular, afianzándose tras una buena zona 1, la más difícil sin duda, ya que tan solo la mitad de los participantes consiguió completarla. Con este excelente resultado saldan su primera participación en el Open Trial 4×4 Zona Centro.

Serie

La categoría más pequeña fue la que contó con un mayor número de participantes, trece en total, con una variada muestra de vehículos, donde los encontramos de estricta serie hasta otros con bloqueos y modificaciones con un solo denominador común: No sobrepasar la medida del neumático de 31”. Diversidad de máquinas y estilos de pilotaje para una intensa y competida mañana donde no faltaron los habituales de la categoría. Entre los más destacados una vez más, el equipo formado por  Santiago Bravo y Rafael Verdugo con su habitual Suzuki Jimny que ponían de manifiesto su experiencia en cada una de las zonas, empezando muy fuerte, penalizando tan solo diez puntos por el uso de las escalas en su tercera zona. Pero en la última sufrían la rotura de un palier y se quedaban sin opción a podio, finalizando en quinta posición.

Buena actuación también la de David Suárez y Adrián Crespón con su veterano Patrol, que se mantenían tras tres zonas al acecho del podio, pero que penalizaban en la cuarta zona, en un tramo con un puente con vigas de hormigón, sin poder finalizarla, penalizando además cuarenta puntos lo que les apartó de colarse entre los tres primeros.

La tercera posición fue para  Juan José Muñoz y Gabriel Herrero también a bordo de un veterano Nissan Patrol, que se acercaban al pleno, ya que tan solo tenían una penalización de cinco puntos a falta de la última zona, pero salían descolocados del obstáculo previo al puente de hormigón y se quedaban colgados, perdiendo las opciones de la victoria.

Sergio García estrenaba nueva montura y afrontaba su primera zona como si le persiguiese el Seprona, perdiendo incluso las planchas al inicio de la zona, lo que obligó al copiloto a regresar por ellas al finalizar el tramo. Posteriormente firmó junto al vencedor la mejor zona 4, la más difícil de los Serie, pero una penalización de 50 puntos en la zona 1 le privó de la victoria.

Victoria que fue para el tándem formado por Fco. José Martínez y Antonio Bauzán, que dieron una lección de trial clásico, sobre esa premisa de que el tiempo no importa y que los obstáculos hay que superarlos “tan despacio como sea posible y tan rápido como sea necesario”, paso a paso, firmando una tarjeta con tan solo 15 puntos de penalización, acercándose de esta manera al pleno. Y eso que una avería en el motor de arranque estuvo a punto de tirar por la borda todo el trabajo, pero pudieron continuar y alzarse con una merecida victoria.

Una vez finalizado el trial, por fin pudimos resguardarnos a la sombra y tras la caldereta ofrecida por la organización se procedió a la entrega de trofeos y suculentos jamones de Sebastián Madero para los mejores de cada categoría.

En definitiva un divertido fin de semana, con grandes momentos y la organización de Festimotor Camarena como siempre, volcada con el mundo del trial.

No quisiera acabar sin hacer referencia, no solo a la organización, ayuntamiento, Proteccion Civil, Guardia Civil y Cruz Roja que hizo posible el evento, sino especialmente a los jueces, que durante todo el fin de semana aguantaron al pie del cañón, al pie de zona las tórridas temperaturas, sin posibilidad de escaparse unos minutos para refrescarse y sin cuyo esfuerzo no es posible un evento de estas características.

Texto y fotos: Alberto Guillén